En las tranquilas aguas de la Bahía de Nipe, en el norte del Oriente cubano, surgió una leyenda que aún eriza la piel de quienes la escuchan: Don Pepe, un tiburón asesino de proporciones descomunales. Los lugareños lo bautizaron así porque su imponente figura y su enorme aleta dorsal, llena de agujeros de bala, lo distinguían de cualquier otro escualo de la zona.
Los Tiburones y la Bahía: Un Romance de Peligro y Sobrevivencia
La Bahía de Nipe era famosa por su abundancia de tiburones. Los pescadores de la región vivían de capturarlos y procesarlos: la piel se exportaba a La Habana y Japón, la carne se convertía en tasajo que llegaba hasta Baracoa, y el aceite, con fama de curativo, se vendía en Antilla. Pero la rutina cambió cuando Don Pepe empezó a cazar por allí.
Con más de cinco metros de largo y un hambre insaciable, este tiburón sembró terror por más de veinte años. Era un depredador astuto que seguía a los barcos en busca de desperdicios o presas desprevenidas. Cuando las autoridades del puerto prohibieron tirar restos al agua, Don Pepe expandió su territorio hasta abarcar zonas como El Ramón, Felton y Nícaro.
Historias de Miedo: Cuando Don Pepe Decidía Aparecer
En la Bahía de Nipe se cuentan decenas de anécdotas sobre el temible tiburón. ¿Te imaginas ver cómo un burro con todo y carreta desaparece en el agua? Pues eso pasó. El pobre animal cayó desde el espigón de Antilla, y Don Pepe lo arrastró hasta el centro de la bahía, dejando a todos boquiabiertos.
Pero no todo quedó en historias curiosas. Los pescadores vivían con el Jesús en la boca 😱, temiendo que Don Pepe atacara sus pequeños botes. Por eso, algunos le arrojaban parte de sus capturas para distraerlo. Pero cuando alguien se negaba, el tiburón mostraba su furia. Una vez, mordió un bote tan fuerte que lo dejó inutilizable, obligando a su ocupante a remar como un loco hacia la orilla.
Tragedia en Punta Salinas: El Día Más Oscuro
El 6 de noviembre de 1943 ocurrió una tragedia que dejó marcada la historia de la bahía. Dos lanchas de pasajeros chocaron cerca de Punta Salinas, y Don Pepe fue el primero en llegar al desastre. Varias personas perdieron la vida, devoradas por un enjambre de tiburones liderados por este coloso.
La Desaparición de Don Pepe: El Fin de una Era
A finales de los años 50, Don Pepe desapareció misteriosamente. ¿Murió de viejo? ¿Fue vencido por otro depredador? Nunca se sabrá con certeza. Lo único claro es que no ha habido otro tiburón igual en las aguas de Nipe.
Esta historia no solo refleja la valentía de los pescadores de Oriente, sino que nos transporta a una Cuba llena de leyendas y misterios. Si alguna vez visitas la Bahía de Nipe, no olvides preguntar por Don Pepe. Aunque ya no esté, su espíritu aún nada en la memoria de todos los que vivieron su reinado. 🌊✨