El estreno del primer supermercado en dólares de La Habana llegó con todo, menos con calma. El recién inaugurado mercado, ubicado en el lujoso Hotel Gran Muthu Habana, fue escenario de una pelea que se volvió viral en redes sociales y que dejó más preguntas que respuestas sobre la tensión social que vive el país.
Un supermercado que deja a muchos fuera del juego 💸
El supermercado, situado en la intersección de 3ra y 70, es un lugar exclusivo para quienes tienen dólares en efectivo o cuentas vinculadas a tarjetas extranjeras. Sí, así mismo: nada de MLC ni pesos cubanos por aquí, mi gente. Esto ha causado un malestar enorme en una población ya golpeada por la crisis económica y donde no todo el mundo tiene acceso a la «moneda dura».
Aunque algunos aplauden la idea de diversificar los mercados, muchos otros lo ven como un símbolo de desigualdad. Y es que, en un país donde la mayoría sobrevive al día a día con ingresos en moneda nacional, estas iniciativas parecen más bien un espejismo, un lujo inalcanzable.
El queso de la discordia 🧀💥
En un video que anda rondando por las redes, se puede ver a una mujer y un joven en plena bronca en la fila del supermercado. Según dicen, el pleito comenzó por una supuesta oferta de productos lácteos –sí, señores, por un quesito– pero lo que terminó saliendo a la luz fue el nivel de frustración que vive la gente.
Aunque no se explican claramente las causas del altercado, las imágenes muestran el nivel de estrés con el que vive el cubano promedio. En un país donde lo más simple puede convertirse en un lujo, las filas y los conflictos en los mercados no son nada nuevo.
¿Por qué este mercado es tan polémico? 🏬🧐
Esta tienda marca una nueva fase en la economía cubana, donde el dólar vuelve a tener protagonismo. Sin embargo, esta decisión no llega sin su cuota de controversia.
- Exclusión económica: La mayoría de los cubanos no tienen acceso directo a dólares en efectivo. ¿Cómo compran entonces? La brecha entre quienes pueden y quienes no sigue creciendo.
- Tensión en la sociedad: Lo que debería ser un lugar para comprar tranquilamente se ha convertido en una fuente de estrés. La bronca del supermercado es solo un reflejo de algo más grande: la frustración acumulada por años de crisis.
- El regreso del efectivo: La decisión de no aceptar MLC (una moneda que muchos consideran “forzada”) ha desconcertado a los compradores. Entonces, ¿qué pasará con quienes ya tienen cuentas en esta moneda?
¿Un queso con sabor amargo?
Esta pelea es más que un simple chisme de la cola, mi gente. Es una muestra de cómo las políticas económicas impactan la vida diaria de los cubanos. En un país donde cada compra parece una misión imposible, las tensiones están a flor de piel, y hasta un simple producto puede encender la chispa.
Mientras tanto, el supermercado sigue funcionando, pero con más preguntas que respuestas. ¿Será esta una solución o solo un parche más en un sistema lleno de grietas?
